“ La vida de cada hombre es un camino hacia sí mismo,
el ensayo de un camino, el boceto de un sendero.”
(Hermann Hesse)
Caminar con la confianza del corazón es seguir el
camino de baldosas amarillas del mundo de Oz. Pero no somos personajes de un
cuento ni de un sueño. No se escuchará el dulce latido de un corazón de
hojalata, ni el rugido de un valiente león, ni los consejos de un
espantapájaros, ni una dulce música que anime el camino.
En este viaje, que hay que hacer en solitario, no
existen brujas, pero si vientos y fantasmas. El árido viento del Sur, que ahoga
y asfixia, morderá nuestros sentidos con ira e intolerancia. El gélido viento
del Norte exhalará dudas y nostalgias de un invierno que estremece las cortinas
del pensamiento... Y el fantasma del miedo nos dejará suspendidos en el vacío,
en la nada.
Pero ni todos los miedos del mundo podrán hacernos
olvidar el único camino que nos lleva a la felicidad. Es el camino de baldosas
amarillas que guardamos en nuestro interior.
"El gélido viendo del Norte exhalará dudas y nostalgias de un invierno que estremece las cortinas del pensamiento". Querida Mari Carmen, estas palabras son una joya de las más valiosas. En realidad, todo el texto es precioso. Te felicito.
ResponderEliminarBesos.
Mila
La verdadera joya es tu presencia, Mila, personas como tú alejan el invierno y serenan el pensamiento.
ResponderEliminarUn beso mi dulce soñadora, gracias por acompañarme.
Cualquier texto que empiece con una cita de Herman Hesse, casi mi autor favorito, ya tiene un buen camino andado...En este caso el camino se anda solo porque literaria y emocionalmente es de una gran belleza. 3.4o de la mañana. Un buen momento para poner punto y final a la escritura y el trabajo mental de este sábado...Sí, los escritores y gestores no tenemos fiestas, me temo. Por elección, evidentemente.
ResponderEliminarHasta lo obligado puede ser elegido. Habrá que ir en busca del Mago de Oz. El de verdad.
Ahora que empieza a llegar a Madrid la luz de la primavera..veo más claro ese camino que debo/debemos seguir. Adoro esa canción, la tengo en 17 versiones distintas de cantantes, Gracias Mcarmen. Un beso
ResponderEliminarHola, Mari Carmen. Es difícil realizar una tan profunda reflexión con tan pocas palabras, pero el acierto al escogeralas veo que te lo ha permitido. Muchas gracias por compartirlo. Me ha recordado a una frase de Epicuro: "Retírate dentro de ti mismo, sobre todo cuando necesites compañía."
ResponderEliminarTodo un placer desccubrir este tu tan bello nido. Muchas gracias dejar abierta la puerta para que puediera entrar.
UN FUERTE ABRAZO!!
Una delicia de autor Hesse..., como tus hermosas y reflexivas palabras... Gran soldadura la tuya, amiga Carmen, hemos de vencer a ese lobo estepario que llevamos dentro y buscar el camino de la felicidad.. cada cual a su manera, por supuesto.
ResponderEliminarAprovecho, querida amiga para enviarte mis más sinceras palabras de agradecimiento por esa cálida bienvenida a esta casa literaria.
Feliz domingo. Con mi mejor abrazo. Laura
Ciertamente es un viaje que hay que hacer en solitario en el que tendremos que librar un sinfín de obstáculos, pero para ello tenemos los chapines de rubí, o como dice nuestra querida Nel nuestro “corazón rubí”... Mi secreto está en golpear los talones juntos y repetir las palabras mágicas “No hay lugar como la felicidad”.
ResponderEliminar“Y el fantasma del miedo nos dejará suspendidos en el vacío, en la nada”... Este fantasma da miedo de verdad.
Mi enhorabuena por la entrada -que es preciosa- y por la elección de la imagen, la cita y la música.
Besos.
Toñi
Querido Emilio, nada en la vida nos viene dado. Perseguir los sueños supone compromiso, esfuerzo y obligaciones, pero ya ves que se obtienen beneficios. En Netwriters estáis haciendo una impecable gestión y creando un asombroso espacio cultural que, lo puedo atestiguar, traspasa fronteras...Las únicas que quedan son las que cada uno eleve a su alrededor.
ResponderEliminarGracias por el esfuerzo y trabajo. Este camino ya no lo andas sólo, somos muchos a tu lado.
Besos y un fuerte abrazo.
Querida Winnieo, qué tendrá la luz que nos atrae tanto e influye en nuestro espíritu...Yo odio el invierno, no tanto por el frío y el mal tiempo, sino por las horas de oscuridad. Es como una cárcel
ResponderEliminarNo sé si conoces Netwriters y el maratón de lectoescritura con el que inauguraron la red social. Uno de los textos que más me gustó, y hubo muchos, fue el de Lorenzo Silva (no recuerdo el título, pero puedes localizarlo fácilmente). En el texto, Lorenzo, indicaba que en un túnel, independientemente de lo que hubiera al final, entre un extremos con luz y la oscuridad en el otro, el ser humano siempre elegía la luz.
Te deseo que encuentres el camino, Winnieo, y como dice esta memorable canción, que tanto nos gusta, tus sueños se vuelvan realidad.
“ En algún lugar detrás del arco iris
Los cielos son azules
Y los sueños que te atreviste a soñar
realmente se vuelven realidad”
Besos y un fuete abrazo.
Hola David, bienvenido a tu casa y gracias por el regalo de esa magnífica frase de Epicuro. Yo creo que el diálogo interior es necesario, para conocerse y desde allí comunicarse con el exterior. No es nada fácil y a veces muy doloroso, pero es la única manera de encontrar, tras alguna que otra batalla, el camino a seguir.
ResponderEliminarGracias David por traer tu estela, espero compartir muchas jornadas hablando de Filosofía, de música... sé que a tu lado aprenderé mucho
Besos y un fuerte abrazo.
Me ha encantado eso de que la vida es un viaje que hay que hacer en solitario. Es algo que a mucha gente le cuesta comprender. De ahí derivan algunos de sus problemas.
ResponderEliminarSin embargo, no estamos solos. Tenemos las armas de nuestro carácter, los amigos/as y, como no, los libros.
Un abrazo de hojalata.
Antes que nada bienvenida, Laura, a esta estancia del maravilloso proyecto que compartimos como es Escritores en Red. Animo a todos a que visiten la tuya y me alegro de que te pasees por la de los compañeros. Vas a disfrutar te lo aseguro.
ResponderEliminarLaura, no tengo muy claro lo de que debemos vencer al lobo que llevamos dentro. Esa dualidad es la que mantiene, en cierto modo, la estabilidad en el ser humano. Por una parte hay que admitir que tenemos una parte salvaje, animal. La de los instintos, la de la supervivencia...Y por otra, no debemos alejar a ese ser que reflexiona constantemente sobre todo lo que le rodea.
Encontrar el equilibrio es lo complicado. Ninguno debe vencer, los dos deben coexistir en esa búsqueda de la felicidad que es la vida.
Besos y abrazos.
Querida Toñi, ya sabía que esta entrada te gustaría, con tal de estrenar unos chapines nuevos...
ResponderEliminarEs cierto que tendremos obstáculos, ellos son los que nos llevan al conocimiento y al convencimiento de que todo lo que necesitamos está en nuestro interior. De ahí es de donde parte nuestra fuerza para tan enorme empresa como es conseguir la felicidad.
Me enseñarás a golpear los talones, yo alejaré el fantasma del miedo y si añadimos el corazón rubí de Nel...nada nos podrá parar.
Gracias por caminar tras el Arco Iris.
Besos y un fuerte abrazo.
Hola Jose, no debemos olvidar que somos pequeñas partes de un todo, y como tales, tenemos derecho a reclamar nuestra individualidad. Otra cosa es que se compartan sueños, proyectos, deseos...pero siempre respetando la libertad de decisión a la que todos tenemos derecho.
ResponderEliminar¿Por qué imaginaba que de entre todos los personajes elegirías al hombre de hojalata? ¿Por tu gran corazón?
Un abrazo de hojalata, me gusta.
Mari Carmen, me ha encantado la entrada sobre todo lo referente a la forma.
ResponderEliminarYo discrepo con Hermann Hesse y en parte contigo. Yo creo que la vida de cada ser es un camino hacia los demás, siendo consciente de quien es uno mismo. Uno se conoce y se reconoce mucho mejor cuando se ve actuar frente a los compañeros de viaje. Para ser feliz hay que sentirse bien interiormente, pero yo entiendo la vida como un viaje en compañia bien elegida y con espacios de libertad en alguna que otra area de descanso del camino.
Un abrazo
Querida Mari Carmen, tú sabes elegir los mejores caminos para llegar al destino final: la felicidad. "El camino de baldosas amarillas" que nos has trazado con palabras nos llevará al destino propuesto aunque antes tengamos de enfrentarnos al miedo. ¿Quién no tiene miedo? Lo peor de esa perturbación tan humana es no poder superarla, no poder quitarnos ese fantasma de nuestra presencia. No faltan desaprensivos en nuestro caminar que, para conseguir su impunidad, intentan amenazarnos y hacernos víctimas del miedo para que callemos y desistamos en favor de su caminar tendencioso y execrable.
ResponderEliminarNunca nos faltarán miedos en la brega cotidiana, pero debemos combatirlos y librarnos de ellos con valentía y la mejor fuerza que tengamos, pues como dijo Publio Siro "Nadie llegó a la cumbre acompañado por el miedo". Deshagámonos de él y conquistemos la meta de la felicidad.
Gracias por esta entrada, con la que hoy me identifico de una manera espeial.
Besos y abrazos.
Ese camino de baldosas amarillas es el que hemos elegido para avanzar, para viajar, para crecer. Y no nos faltaran peligros, ni amenazas, ni tristezas, pero hay que seguir poniendo baldosas. Yo no pienso dejar de hacerlo. ¿Y tú?
ResponderEliminarUn abrazo.
El camino es verdad que hay que hacerlo en solitario, pero si es por una senda de baldosas amarillas como la que describes será mucho más fácil.
ResponderEliminarUn abrazo
Querida Alicia, yo no discrepo contigo ni con nadie sobre esta cuestión. Si entiendo que cada individuo es dueño de su propia vida, es lógico que acepte que haya distintas concepciones y maneras de afrontarla, todas aceptables y ninguna discutible.
ResponderEliminarYo imagino las vidas de los seres humanos como un gran mapa de carreteras. Las hay que discurren paralelas, otras en sentido contrario, algunas discurren solitarias. Hay confluencias, separaciones, giros inesperados...
¿Cuál es la mejor manera de viajar? Con la que cada uno se sienta feliz. Difícil tarea ¿Pero no es lo que todos buscamos?
Besos y un fuerte abrazo.
Querido Alex, como dice Woody Allen " El miedo es mi compañero más fiel, jamás me ha engañado para irse con otro." Es una de las frases más certeras que se puede encontrar. Todos tenemos miedos, e incluso creo que en cierta manera, sin dejar que se conviertan en fobias, son necesarios. No debemos olvidar que el miedo también es la base de la prudencia...y la prudencia de la supervivencia. No confundamos miedo con prudencia, ni valentía con estupidez.
ResponderEliminarSea como fuere, Alex, no dejemos que el miedo frene nuestros pasos. Tendremos la valentía y la prudencia necesaria para dar el siguiente paso. ¿Lo damos?
Besos y un fuerte abrazo.
Yo tampoco, Maribel, una a una, con esfuerzo y tesón. Avanzando adelante, siempre adelante ...con los impulsos de la mente y el corazón.
ResponderEliminarBesos y un fuerte abrazo,
Querida Ana, no sé si será más fácil...el camino hacia uno mismo que debe impulsar nuestros pasos, siempre será difícil. Pero por lo menos con la imaginación podemos dotarlo de belleza.
ResponderEliminarBesos y un fuerte abrazo.
Si no somos capaces de encontrar ese camino que nos lleve a nosotros mismos, mucho más difícil será encontrar el que nos acerque a los demás. Como casi siempre, la dificultad está en buscar ese camino que propones, muy lejos de esas metas que la sociedad nos propone de ser "perfectos". La armonía genera armonía y si no somos capaces de identificarla en cada uno...
ResponderEliminarUn abrazo mi querida Mª Carmen. Que maravillosa reflexión, con tu sello.
Querida Mª Carmen: a mi me va más el frío, el viento aunque sea de tormenta. Y cierto que por esos parajes andamos solos; la ventaja es que SI existen brujas que nos acompañan, que muchas veces nos guian.
ResponderEliminarEl final, ya lo sabemos, es el prodigioso descubrimiento del viaje, más allá de cualquier meta.
Me gusta tu entrada. Un beso.
Dear and sweet Mariatxu,
ResponderEliminarEl camino de Baldosas amarillas es el correcto porque es el camino. La magia a veces ocurre, pero si miramos atrás, nos damos cuenta de que no existe, la creamos nosotros mismos, al igual que la felicidad.
Magia y felicidad son semillas que van con nosotras, y es nuestra misión esparcirlas por el Este y el oeste, por el Norte y por el Sur, y así entre todos coleccionamos cada vez momentos más mágicos, más felices.
Cuentan las leyendas que quienes son jardineras de semillas mágicas, ya no se llaman brujas, sino magas.
jajaja.
Besos
Nelken
Querida Rosa, todo aquello que necesitamos para afrontar la vida habita en nuestro interior. La mejor manera de relacionarnos con los demás es tan sencillo como ponerse siempre en el lugar del otro. Tú lo sabes y lo demuestras con tus poemas, porque el que sabe leer en su alma, también lo hace en la de los demás.
ResponderEliminarLa armonía genera armonía qué bello pensamiento...
Gracias por ser y por estar.
Besos y un fuerte abrazo.
Querido Manuel, yo no creo que en este camino existan brujas, sino que nosotros creamos espejismos para esconder lo que no queremos hallar o admitir. Lo que si es cierto es que hay quienes nos esperan al final de camino. Entre brujas y magos anda en juego...¿O es entre magas y brujos? No lo tengo muy claro.
ResponderEliminarY tienes toda la razón: el asombroso descubrimiento es el viaje.
Besos y un fuerte abrazo.
“ Magia y felicidad son semillas que van con nosotras, y es nuestra misión esparcirlas por el Este y el oeste, por el Norte y por el Sur, y así entre todos coleccionamos cada vez momentos más mágicos, más felices.”
ResponderEliminarMi linda flor, qué bello comentario. Yo si creo que la magia existe. Creo en la magia de la fe, de la esperanza, del cariño. o de los sueños. Es lo que hace que un libro agotado termine en mis manos...hay hechos inexplicables. Parece mentira que existan, pero hay están, tan tangibles como tú y como yo.
Mi fiel jardinera de semillas mágicas, bruja o maga, esparce tus semillas para coleccionar momentos felices.
Besos y abrazos de algodón.
Bihotzez.
Y soñamos con un lugar más allá del arco iris creyendo que está muy, muy lejos cuando, en realidad, ese mágico lugar está dentro de nosotros mismos.
ResponderEliminarBesos
la magia, la verdadera magia siempre está dentro de nosotros, no hay que buscar hadas, sortilegios, pócimas...tenemos que creer en nosotros mismos.
ResponderEliminarQuerida Nanny, qué extraño se me hace verte volar de nuevo en tu escoba ;-D
Besos y un fuerte abrazo.