El primer apunte que quiero hacer, y que nos ayudará
a conocer mejor la obra de Santiago Solano Grande, es que fue el creador de la
primera agrupación digital de España, EnR, de la que, en la actualidad, es el presidente. Esa presencia analógica —con
sus interacciones, sus vías de expresión, de conocimiento… habitada en
libertad, pero también en confluencia— es una constante en su forma de entender
la escritura, lejos de límites y estereotipos.
Y
ahora, precisada una de las palabras del título, «digital», vamos a centrarnos en otra que también es clave:
«yo». No, no os asustéis… No voy a entrar en cuestiones filosóficas ni
humanísticas sobre el término, porque
todos sabemos que nuestra identidad —quizás más marcada en el caso de los
escritores que no dejan de ser, en cierto modo, cada personaje que inventan— la
conforman varios «yoes». Por eso no tenéis que asombraros ante la cantidad de
personajes que entran en escena, salen, se unen en uno solo, se disocian… para
acceder a ese Elías Quimey que, como se dice en la sinopsis, es un post humano
autorizado a utilizar a conveniencia los radicales libres de La Red.
En este libro no encontraréis una novela tradicional
de planteamiento nudo y desenlace, sino un conjunto de hechos que, en
apariencia, se suceden inconexos, aislados, pero que, como un rompecabezas, se
unen al final para dar respuestas a las diversas incógnitas que se nos plantean
durante su lectura. Un puzle que no deja de ser el reflejo de nuestro propio
desarrollo personal.
Os voy a pedir que realicéis conmigo un pequeño
experimento. Evocar durante un instante el transcurso del día de hoy. Si lo
analizáis, no hallareis un solo hilo conductor, es imposible. Porque cada
sueño, pensamiento o acción que hayamos tenido o realizado es, en la mayoría de
los casos, independiente y desvinculado
del anterior. Es nuestra mente la que se encarga de seleccionar, desechar o
guardarlos en la memoria para dar unidad a una fecha que, sumada a otras
jornadas, conforman nuestra biografía. Pues bien, Santiago Solano, convertido
en una Inteligencia Artificial, ha actuado de la misma manera para presentarnos
este extraño pero interesante viaje por la vida, la memoria y los sueños, que
no dista de lo que debe ser la Literatura.
Qué presentación más sencilla y más certera. Me gustan los libros que se salen de lo habitual, que rompen estereotipos, porque como decía Luis Buñuel: "La moda es la manada. Lo interesante es hacer lo que a uno le da la gana."
ResponderEliminarFelicidades al escritor y a la presentadora.
Un abrazo.
¡Vale, lo intento de nuevo!
ResponderEliminarQue gracias, por todo tu cariño, todas tus palabras... por este texto que leo un mes o más después y que recuerdo desde la niebla de entonces que arde todavía en mi corazón.
Besitos...
Lo has bordado, Mari Carmen. Los viajes por la vida, incluidos los extraños, siempre nos dejan en destinos productivos y abiertos, después de haber superado -y gozado- hitos y etapas enriquecedores para el viajero. No olvidemos que Santiago comparte sus rutas, nos instruye con ellas y sus lectores se lo agradecemos. Enhorabuena a los dos por hacerlo tambien. Besos, abrazos.
ResponderEliminarEscueta, sencilla y precisa explicación de lo que el lector encontrará en el libro. Muchas felicidades a ambos, presentadora y autor.
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