Recupero este espacio como lo que siempre he deseado que fuera: un lugar de encuentro, de expresión...siempre desde la libertad y el respeto. Asumo lo ocurrido como una lección aprendida. Tengo que pasar página.
Agradezco los apoyos recibidos. Alejaron el invierno y me dejaron, a pesar de todo, un dulce Noviembre.
Estaba fuera y solo me he enterado del ataque que has sufrido a toro pasado y sin saber de qué iba; en cualquier caso, haces bien en pasar página y en seguir siendo como eres. Que las lágrimas rueden y se evaporen y que no me entere yo de que nadie te hace llorar.
Seguiremos creyendo aunque otros pierdan la esperanza. Seguiremos dando amor aunque otros siembren odio. Seguiremos construyendo aunque otros destruyan. Hablaremos de paz en medio de la guerra. Seguiremos iluminando en medio de la oscuridad. Seguiremos sembrando aunque otros pisen la cosecha. Transmitiremos motivos de alivio dónde sólo haya dolor. Pintaremos pinceladas de alegría dónde encontremos tristeza. Dibujaremos sonrisas en rostros con lágrimas porque la sonrisa es el lenguaje universal de las personas nobles e inteligentes. Porque en medio de la tormenta siempre aparece un rayo de sol algún niño que nos sonríe pájaros que nos cantan y mariposas que nos regalan su belleza.
Con todo mi cariño para ti y los que han colaborado en pintarte sonrisas.
Eso es, Mari Carmen, levantarse con el corazón ante lo incomprensible. Has puesto un poema muy bonito para seguir el camino. Y muy simbólico.
Siempre has sido una buena escritora y una buena compañera. Ojalá el absurdo de lo ocurrido y las lágrimas guardadas te empujen en el mar de la Literatura, que es la esencia de todo lo que aquí vivimos y debe ser solo un camino de creación, concordia y paz. Bienvenida de nuevo.
Celebro que hayas remontado. Yo tampoco sé qué es lo que ha pasado. Pero no podemos seguir llorando ante almas mal encaminadas. Mejor dicho, ni tan siquiera derramar una sola lágrima. Al igual que Ana y otros compañeros no he podido enterarme de los comentarios. Sí ver mi nombre involucrado y eso es muy muy duro. Porque todos me han inculpado. A todos perdono y respeto, pese a dolerme por tí, por mí. Escribí un coment a Santiago desde Soria dándote apoyo pero parece que desapareció la página. Me quedo con nuestras palabras, Mari Carmen, ese es lo que cuenta.
E intentaré ser fuerte como tú para poder volver a escribir, ahora no puedo, estoy muy desconcertada y triste.
Enhorabuena por tus palabras y tu valía.
Besos y abrazos, Cris.
N.- No veo las imágenes de tus dos últimos poemas. Es posible que sea un problema de mi blog. No lo sé.
“Brillaba en una floresta durante noche sombría la luciérnaga modesta que ignoraba que lucía. Envidioso de su brillo cierto sapo que la vio fue y escupió al gusanillo veneno que lo mató. ¿Por qué –exclamo falleciente-, a un desvalido matar? Y escupiendo nuevamente, dijo el sapo: “No brillar!”
“Al contrario de lo que le sucede a nuestra luciérnaga, tú lucirás en compañía de cientos de ellas que te protegerán en la noche y que poco a poco te enseñarán a brillar con más fuerza.”
Esto es parte del primer comentario que puse en tu recién estrenada casa... De esto hace ya casi un año, y no me equivoqué, a la vista está: arropada con el calor de todas las personas que te quieren.
Con tus entradas y comentarios -con las que nos das ánimos, aliento, alegrías...-, en más de una ocasión me han brotado las lágrimas... Estas lágrimas están guardadas entre algodones en mi corazón. El resto de las lágrimas “que rueden, se evaporen y lleven el recuerdo al olvido”, como bien dices en este precioso poema. Sigue siendo tú misma. Te quiero.
Mª Carmen, aunque estos días no entro tanto como me gustaría en ésta nuestra casa de Escritores en Red, he querido hacerlo hoy de forma especial para enviarte todo mi apoyo y recordarte que nada ni nadie puede quitarnos la libertad de expresar, con respeto sin duda, todo aquello que salga de nuestro sentimiento. No creo que debas aprender ninguna lección, ni siquiera pasar página, porque nada hiciste que requiera un reciclado. Estoy segura de ello, a pesar de no haber leído nada de lo que provocara la situación. Tu luz y tu bondad lucen siempre claras en cada uno de los comentarios que generosamente nos haces a todos, sin pereza alguna…. No necesito más pruebas. Un abrazo enorme y mi apoyo incondicional siempre. Te lo has ganado por derecho expresión
Creo que me he perdido algo, Mari Carmen (he estado liada con mi novela), pero intuyo que bien perdido está. Lo que me importa eres tú y tu regreso, y por supuesto este poema precioso. "No hay barandilla para el vértigo de las lágrimas". ¿Será por eso que caen aunque no queramos o no lo merezcamos? Un fuerte abrazo.
“ No hay barandilla para el vértigo de las lágrimas “
Si hay barandilla para el vértigo de las lágrimas. El cariño de los que me habéis acompañado en estos días oscuros ha sido la barandilla que las han han frenado y las han hecho menos amargas.
Abro mi alacena...ocupáis un espacio importante en ella.
Recupero este espacio como lo que siempre he deseado que fuera: un lugar de encuentro, de expresión...siempre desde la libertad y el respeto. Asumo lo ocurrido como una lección aprendida. Tengo que pasar página.
ResponderEliminarAgradezco los apoyos recibidos. Alejaron el invierno y me dejaron, a pesar de todo, un dulce Noviembre.
Gracias de todo corazón.
Besos y abrazos.
Dicen que las lágrimas proceden del mar, el agua circula por las nubes, las cimas de las montañas, los ríos, manantiales.
ResponderEliminar¿Recordar qué? Mejor quedarse con el rocío de las rosas rojas que aún brillan en noviembre, las gotas de lluvia sobre los cristales del coche..
El agua conocida evapora los vértigos.
Abrazos de corazón
Nelken Rot
Estaba fuera y solo me he enterado del ataque que has sufrido a toro pasado y sin saber de qué iba; en cualquier caso, haces bien en pasar página y en seguir siendo como eres. Que las lágrimas rueden y se evaporen y que no me entere yo de que nadie te hace llorar.
ResponderEliminarUn beso enorme
Seguiremos creyendo
ResponderEliminaraunque otros pierdan la esperanza.
Seguiremos dando amor
aunque otros siembren odio.
Seguiremos construyendo
aunque otros destruyan.
Hablaremos de paz
en medio de la guerra.
Seguiremos iluminando
en medio de la oscuridad.
Seguiremos sembrando
aunque otros pisen la cosecha.
Transmitiremos motivos de alivio
dónde sólo haya dolor.
Pintaremos pinceladas de alegría
dónde encontremos tristeza.
Dibujaremos sonrisas
en rostros con lágrimas
porque la sonrisa es
el lenguaje universal de las personas
nobles e inteligentes.
Porque en medio de la tormenta
siempre aparece un rayo de sol
algún niño que nos sonríe
pájaros que nos cantan
y mariposas que nos regalan su belleza.
Con todo mi cariño para ti y los que han colaborado en pintarte sonrisas.
Un fuerte abrazo.
Eso es, Mari Carmen, levantarse con el corazón ante lo incomprensible. Has puesto un poema muy bonito para seguir el camino. Y muy simbólico.
ResponderEliminarSiempre has sido una buena escritora y una buena compañera. Ojalá el absurdo de lo ocurrido y las lágrimas guardadas te empujen en el mar de la Literatura, que es la esencia de todo lo que aquí vivimos y debe ser solo un camino de creación, concordia y paz. Bienvenida de nuevo.
Port
Contra el vértigo, nada mejor que levantar los pies del suelo, querido Mª Carmen.
ResponderEliminarContra el invierno, lo mejor es una generosa chimenea llena de troncos.
Contra la mala gente nos defendemos peor. Quizá el mejor talisman sean las personas como tu.
Feliz día. Un beso.
Querida Mari Carmen:
ResponderEliminarCelebro que hayas remontado.
Yo tampoco sé qué es lo que ha pasado. Pero no podemos seguir llorando ante almas mal encaminadas. Mejor dicho, ni tan siquiera derramar una sola lágrima. Al igual que Ana y otros compañeros no he podido enterarme de los comentarios. Sí ver mi nombre involucrado y eso es muy muy duro. Porque todos me han inculpado.
A todos perdono y respeto, pese a dolerme por tí, por mí.
Escribí un coment a Santiago desde Soria dándote apoyo pero parece que desapareció la página.
Me quedo con nuestras palabras, Mari Carmen, ese es lo que cuenta.
E intentaré ser fuerte como tú para poder volver a escribir, ahora no puedo, estoy muy desconcertada y triste.
Enhorabuena por tus palabras y tu valía.
Besos y abrazos,
Cris.
N.- No veo las imágenes de tus dos últimos poemas. Es posible que sea un problema de mi blog. No lo sé.
“Brillaba en una floresta
ResponderEliminardurante noche sombría
la luciérnaga modesta
que ignoraba que lucía.
Envidioso de su brillo
cierto sapo que la vio
fue y escupió al gusanillo
veneno que lo mató.
¿Por qué –exclamo falleciente-,
a un desvalido matar?
Y escupiendo nuevamente,
dijo el sapo: “No brillar!”
“Al contrario de lo que le sucede a nuestra luciérnaga, tú lucirás en compañía de cientos de ellas que te protegerán en la noche y que poco a poco te enseñarán a brillar con más fuerza.”
Esto es parte del primer comentario que puse en tu recién estrenada casa... De esto hace ya casi un año, y no me equivoqué, a la vista está: arropada con el calor de todas las personas que te quieren.
Con tus entradas y comentarios -con las que nos das ánimos, aliento, alegrías...-, en más de una ocasión me han brotado las lágrimas... Estas lágrimas están guardadas entre algodones en mi corazón. El resto de las lágrimas “que rueden, se evaporen y lleven el recuerdo al olvido”, como bien dices en este precioso poema.
Sigue siendo tú misma.
Te quiero.
Toñi
Inteligente y emotivo poema, Mari Carmen. Me alegra mucho volver a verte por aquí, y que poco a poco "las aguas vuelvan a su cauce"
ResponderEliminarUn fortísímo abrazo.
Mila
Mª Carmen, aunque estos días no entro tanto como me gustaría en ésta nuestra casa de Escritores en Red, he querido hacerlo hoy de forma especial para enviarte todo mi apoyo y recordarte que nada ni nadie puede quitarnos la libertad de expresar, con respeto sin duda, todo aquello que salga de nuestro sentimiento.
ResponderEliminarNo creo que debas aprender ninguna lección, ni siquiera pasar página, porque nada hiciste que requiera un reciclado. Estoy segura de ello, a pesar de no haber leído nada de lo que provocara la situación. Tu luz y tu bondad lucen siempre claras en cada uno de los comentarios que generosamente nos haces a todos, sin pereza alguna…. No necesito más pruebas.
Un abrazo enorme y mi apoyo incondicional siempre. Te lo has ganado por derecho
expresión
Hola Mari Carmen,
ResponderEliminarCreo, sinceramente, que eres una tía de puta madre. Y no digo más.
Un fuerte abrazo,
Jose
Creo que me he perdido algo, Mari Carmen (he estado liada con mi novela), pero intuyo que bien perdido está. Lo que me importa eres tú y tu regreso, y por supuesto este poema precioso.
ResponderEliminar"No hay barandilla para el vértigo de las lágrimas". ¿Será por eso que caen aunque no queramos o no lo merezcamos?
Un fuerte abrazo.
“ No hay barandilla
ResponderEliminarpara el vértigo
de las lágrimas “
Si hay barandilla para el vértigo de las lágrimas. El cariño de los que me habéis acompañado en estos días oscuros ha sido la barandilla que las han han frenado y las han hecho menos amargas.
Abro mi alacena...ocupáis un espacio importante en ella.
Besos y abrazos de todo corazón.
Gracias a tod@s