miércoles, 25 de noviembre de 2015

Caricias




















El sonido de unos puños golpeando una puerta resuena en lo más profundo de sus sueños. Mary se despierta asustada. Respira aliviada al comprobar que está en la habitación del motel junto a la playa. Se dirige al  baño para refrescase la cara. Se mira en el espejo. Instintivamente, saca del neceser el maquillaje para tapar los moratones que van tornándose amarillentos. Destapa el bote y tira el contenido en el lavabo. Observa cómo se desliza por la cerámica creando caprichosas formas. El rumor de las olas la trae a la realidad. Abandona la habitación y cruza desnuda  la arena. Sonríe mientras siente su piel erizarse al adentrarse en el mar. Hace tanto tiempo que nadie la acaricia con tanto mimo...

14 comentarios:

  1. Una sola voz, un solo grito: no más violencia contra las mujeres.

    ResponderEliminar
  2. Estremecedor, ese grito que no se oye, que no se habla; el que obliga a tod@s a reclamar justicia.
    Besos y abrazos.

    ResponderEliminar
  3. En pocas palabras, que son como brasas las que quema, para el que siente los latidos de su corazón, se vislumbra tanto sufrimiento y a la vez tanto calor humano.
    Gracias.
    Besos

    ResponderEliminar
  4. No más violencia de género, machista, contra las mujeres... Nunca más.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. Salvaje, descomunal y... necesario. Como siempre visibilizando lo que se suele esconder.
    Un fuerte abrazo y mi incondicional admiración.

    ResponderEliminar
  6. Estremecedor, niña dulce.
    Como siempre, tu hermoso corazón asoma en lo que escribes.
    Un abrazo enorme.

    ResponderEliminar
  7. Hoy, lo que menos importa es este texto, sino lo que provoca. Y es que los agresores sepan que nuestros ojos no están cerrados, que abrazamos como propio el dolor de todas las mujeres que sufren y que la indiferencia no es nuestra elección. Gracias, Pedro, Rosa, Antonio, Esther, Luismi y Vichoff, por uniros a esa voz.

    Besos y muchos abrazos, de todo corazón.

    ResponderEliminar
  8. Yo también me uno a esa voz , Mari Carmen. Magnífico texto para "denunciar" como acostumbras. Un abrazo muy fuerte.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Nines. Es importante que sepan que no están solas y que tienen, como la protagonista de mi relato, derecho a una vida libre de violencia.

      Un fuerte abrazo

      Eliminar
  9. Un maravilloso y estremecedor llamamiento contra la violencia de género.
    Cómo algo escrito con tanta dulzura puede expresar tan bien el horror del maltrato.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, Josep, por unirte a este llamamiento y encontrar dulzura en el relato. Si hay algo que me preocupa es que alguna mujer se sienta ofendida al leerlo.

      Un beso grande

      Eliminar
  10. La imagen de la mujer entrando en el mar me parece extraordinaria. El amor solo puede existir en libertad. Lo demás es puro engaño.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exacto, Jose. Como dijo alguien, no recuerdo en este momento quién fue, te quiero libre incluso de mí.

      Besos y muchos abrazos

      Eliminar

Gracias por tu visita